De casualidad , estuve ayer también hablando de Gáldar, y como no podía ser de otra forma, tomando café.
Mientras iba caminando, veo que me 'habanan' desde el otro lado de la calle.
Creo reconocer a un par de amig@s a l@s que hace tiempo no saludaba. En cuanto puedo cruzo la calle, porque por mucho interés que tenga en saludar a esto@s amig@s, no es como para cruzar la calle sin mirar, no vaya a ser que alguno de l@s que circulan por ella, estén más despistad@ todavía que yo, y la terminemos liando.
Saludos, risas, bromas, algún comentario acerca del tiempo que hace que no coincidíamos, es decir, casi lo habitual cuando sin querer, de casualidad, tienes un pequeño imprevisto ( grato además ) en la planificación que tenías, y que te interesa cumplir·
Mientras iba caminando, veo que me 'habanan' desde el otro lado de la calle.
Creo reconocer a un par de amig@s a l@s que hace tiempo no saludaba. En cuanto puedo cruzo la calle, porque por mucho interés que tenga en saludar a esto@s amig@s, no es como para cruzar la calle sin mirar, no vaya a ser que alguno de l@s que circulan por ella, estén más despistad@ todavía que yo, y la terminemos liando.
Saludos, risas, bromas, algún comentario acerca del tiempo que hace que no coincidíamos, es decir, casi lo habitual cuando sin querer, de casualidad, tienes un pequeño imprevisto ( grato además ) en la planificación que tenías, y que te interesa cumplir·
·Cuando intento despedirme, decirles que en otro momento seguimos, que ya nos veremos, noto, como por parte de este par de amig@s tienen intención de seguir de pié, casi en mitad de la acera, ahora rodándonos a un lado, para que pase quien con un carrito de beb@s va hablando por el móvil (no estaba prohibido hablar por el móvil y conducir?) sin que nos deje las rodillas peladas por el despiste que lleva; ahora poniéndonos en fila india, pegadit@s a los coches que están aparcados, para que pasen esa pareja de ancian@s, que llevan bastón, que caminan con la calma que solo la vida otorga.
A la tercera pausa en la conversación, esta vez para que pase una 'jurria' de chiquill@s que van corriendo por la acera, como si les hubieran dado este mismo día las vacaciones.
A la tercera pausa, me ruedo yo un poco más, me sitúo entre este par de buenos amig@s, y con la mano en la espalda, les invito a caminar, a dejar ese cachito de acera despejado, para que lo puedan utilizar l@s que realmente están por la labor de andar, aunque solo sea deambulando calle arriba y calle abajo, porque la acera es para caminar, les digo, no para estar ahí parados, como faros frente al Mar.
Es curioso, porque podríamos haber estado quince minutos con seguridad, y si me apuran hasta es posible que media hora, hablando, de pie en medio de la acera, dejándonos llevar por la conversación, y sobre todo, por la 'marea humana' que a esas horas llenaba la acera, que para nada es estrecha, pero que carajo, no está pensada como avenida, ni como paseo donde detenerte para hablar, no, es una acera de pueblo, para caminar.
Con una sonrisa, les digo que sí, que 'toito' lo que quieran, pero haberlo pensado antes, que ahora, no se libran de tomarnos uno de esos cafés que tenemos apalabrados.
Buscamos una cafetería donde descansar un poco, donde retomar la converasción, sin apenas interrupción, apenas unos minutos, cuando quien nos atiende, nos pregunta qué vamos a tomar, que si queremos algo para picar. Tras esta breve interrupción para recoger el pedido, en un par de minutos, otra interrupción mas breve todavía, para servirnos lo que pedimos, y ahora si, tenemos casi todo el tiempo del mundo para hablar, para compartir cositas, para aprender un poco de como somos, en base a escuchar como nos ven l@s demás.
Por favor, si han de decirme algo más que "Hola, Que tal, o Adíos", bajémonos de la acera, busquemos donde tomarnos ese café que nos está esperando, y con calma, como debe ser, retomemos el tema.
·
A la tercera pausa en la conversación, esta vez para que pase una 'jurria' de chiquill@s que van corriendo por la acera, como si les hubieran dado este mismo día las vacaciones.
A la tercera pausa, me ruedo yo un poco más, me sitúo entre este par de buenos amig@s, y con la mano en la espalda, les invito a caminar, a dejar ese cachito de acera despejado, para que lo puedan utilizar l@s que realmente están por la labor de andar, aunque solo sea deambulando calle arriba y calle abajo, porque la acera es para caminar, les digo, no para estar ahí parados, como faros frente al Mar.
Es curioso, porque podríamos haber estado quince minutos con seguridad, y si me apuran hasta es posible que media hora, hablando, de pie en medio de la acera, dejándonos llevar por la conversación, y sobre todo, por la 'marea humana' que a esas horas llenaba la acera, que para nada es estrecha, pero que carajo, no está pensada como avenida, ni como paseo donde detenerte para hablar, no, es una acera de pueblo, para caminar.
Con una sonrisa, les digo que sí, que 'toito' lo que quieran, pero haberlo pensado antes, que ahora, no se libran de tomarnos uno de esos cafés que tenemos apalabrados.
Buscamos una cafetería donde descansar un poco, donde retomar la converasción, sin apenas interrupción, apenas unos minutos, cuando quien nos atiende, nos pregunta qué vamos a tomar, que si queremos algo para picar. Tras esta breve interrupción para recoger el pedido, en un par de minutos, otra interrupción mas breve todavía, para servirnos lo que pedimos, y ahora si, tenemos casi todo el tiempo del mundo para hablar, para compartir cositas, para aprender un poco de como somos, en base a escuchar como nos ven l@s demás.
Por favor, si han de decirme algo más que "Hola, Que tal, o Adíos", bajémonos de la acera, busquemos donde tomarnos ese café que nos está esperando, y con calma, como debe ser, retomemos el tema.
·
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario