Ventaja

En los años '. .. ... y tantos', una emisora de radio, tenía como frase publicitario la siguiente advertencia:

"Las autoridades Sanitarias advierten que fumar es perjudicial,de Nosotr@s, NO dicen Nada"

Recuerdo uno de mis primeros momentos de 'míedo escénico', uno de esos momentos en que parece que no recuerdas 'na_de_na', cuando por más que intentas hablar, de decir algo tan sencillo como "Hola, Buenas Noches", se convierte casi casi en una tarea digna de titan@s, imposible para alguien como yo, que lo único que pretendía era participar en un programa de radio nocturno al que me habían invitado·

·Los que hayan pasado por situaciones similares, sabrán como me sentí, solo acertaba a ver el micrófono que había ante mi. Durante un par de minutos, ese fue todo mi campo de visión, todo mi mundo, todo mi 'saber', y me atraganté.

Imagino que el Locutor, esperando algo similar, lo tenía preparado, y sin que alterará demasiado el curso del programa, retomo el hilo de la conversación. Nos reímos a más no poder, de la situación, de mi 'bautismo de aire'.

Puede que fuera por ese mal trago que ahora hablo con un poco más de comodidad?

En estos días me han recordado lo grato que al parecer es hablar conmigo?
No me lo han dicho de forma tan directa, porque conocen de antemano la respuesta, pero sí me he dado cuenta de que en más de una ocasión, esa llamada por saludar, o el hecho de 'asomar' a esta ventana que es Internet, pasa casi por arte de Birli Birloque, de unos minutos que disponíamos en principio, a poco que nos despistemos, a estar "de cháchara" hasta que ya es tarde para las demás cosas que teníamos que hacer.

Aunque en ocasiones me habrá pasado a mi, lo haya notado yo o no, si es cierto, que a veces, un poco por incordiar, he intentado, y a veces he conseguido, que quien dice desde hace 2 minutos que ya se tiene que ir, mantenga "La Conversa", un par de minutos más. Sí, así de ruin parece que puedo llegar a ser :-P

En una ocasión conseguimos, porque fue cosa de d@s, que amparados en la complicidad de la lluvia, un simple "Bueno, hasta luego, Adiós", se prolongara por espacio de media hora, hasta que con más suerte que acierto, encontré, bajo la lluvia, a quien al otro lado de la llamada, me hacía ese trayecto mas ameno.
Encontrar y conseguir sorprender a quien sentad@ en su coche, al cobijo de la lluvia, seguía la conversación, consciente de que yo estaba conduciendo, pero sin imaginar ( verdad? ) que estaba por llegar, por estar tan cerquita que casi casi notaba el vaho de su respiración dentro del coche.

Buscar donde guarecernos de la lluvia, mientras tomábamos un café, mientras nos reíamos de la casualidad de vernos ese día también.

Parece que la buena compañía, la charla más o menos animada, el hecho de gastarnos alguna broma de parte y parte, crea una cierta adicción. Si le añadimos el buchito de café, algo para picar; en ocasiones visitas inesperadas, ya sean para llevar o para traer; esos 'trueques' de recetas escritas, en ocasiones, trueques incluso de la comida ya preparada, para probar, para saborear y aprender como de bien puede quedar ese plato, cuando lo hace quien lo sabe preparar como debe ser.

Sí, al parecer, podemos, casi sin querer, llegar a crear cierta Adicción.